COBERTURA DE “DEMASIADO HUMANO”

Por Valeria Lugosi
Darío Sztajnszrajber entra con paso lento pero seguro a Eter, camino a Radio Eter, mientras es filmado. Apenas se acomoda en el estudio, acepta un mate, entretanto su productora lo pone al día con las hojas de ruta que ordenan los contenidos de “Demasiado Humano”, que va los martes de 12 a 13 por Radio Madre AM 530, y que puede descargarse por quien quiera, y por la radio que quiera, gratuitamente, para ser emitido. La cuarta emisión, hoy se grabará en las instalaciones de la escuela.

Esta emisión será regida por la letra D. Esto significa que se hablará sobre una temática específica pero abarcada desde los puntos de vista de filósofos cuyos apellidos empiecen con D, como por ejemplo el francés Gilles Deleuze. En esta oportunidad, los alumnos de Eter, más precisamente de la materia Inserción en los Sistemas de Radio de la carrera de Producción de radio, fueron los encargados de hacer informes que formaran parte de este “Demasiado Humano”.

El nombre del programa es una clara referencia al libro de Friedrich Nietzsche, el que Darío abrió por primera vez a los 15 años y el culpable de que haya descubierto a la filosofía como su vocación.

Basta con escucharlo en la radio, en la televisión o en el teatro para saber que Darío tiene una manera de expresarse tal como si estuviese narrando un cuento. En ningún momento, lee lo que dice. Simplemente deja fluir sus ideas, entrelazando verbos, sujetos, predicados, artículos y adjetivos sobre el aire. Todo el tiempo le da al oyente herramientas para que se vea tentado a descubrir qué rol tiene la filosofía en su vida. ¿Se dará cuenta que, además de dar clases en la facultad, da clases en la radio? Cada pensamiento, cada referencia, cada nombre, puede estar reflejado como un apunte en un cuaderno lleno de garabatos. Tómalo o déjalo.

La música también es un género importante para “Demasiado humano”. Suena un tema de Soda Stereo, “Génesis” y Darío apunta: Gustavo Cerati construye desde su génesis la subjetividad con la música, que nos forma a cachetazos, esos golpes dulces”.

Y de ahí nos vamos directamente a pensar: ¿por qué todo tiene que tener un origen? Según relata este filósofo de apellido difícil, el ser humano necesita creer que todo tiene un principio. Si no, no le encuentra un sentido. Nos cuesta pensar de otra manera, y la cultura funciona como una forma de contención. “El sinsentido es tan basto…”¸reflexiona con la luz de AIRE encendida, y sigue: “¿Acaso no podemos creer que siempre hubo mundo?”.

Al igual que en su obra de teatro Desencajados, Darío vuelve a demostrar que la música y la filosofía están más relacionadas de lo que creemos. Se calza los auriculares para oír un informe hecho por alumnos de ETER sobre la filosofía de Luis Alberto Spinetta, más precisamente de la canción “Barro tal vez”, compuesta a los 15 años del artista. En esa pieza radiofónica se escuchan diferentes versiones y varios artistas dando su opinión. La búsqueda del sentido en la poesía de Spinetta es continua, e incluso aborda diferentes temáticas a lo largo de su duración. Para finalizar el bloque, el filósofo elige la versión de esa canción de Desencajados.

Las señas entre su productora (su primera oyente) y él fueron pocas. Ella lo mira con admiración, cómo un alumno observa a su profesor cuando habla de algo que le interesa. Sólo le marcó las pausas y el cierre del programa.

En definitiva, la visita de Darío Sztajnszrajber fue una gran clase que incluyó varías disciplinas: cómo hacer radio, cómo empezar a pensar y cómo disfrutar de lo que se hace.